CIUDAD DE MÉXICO. Al llegar a una entrevista de trabajo las personas se enfrentan a un proceso en que tienen que demostrar que sus habilidades y experiencias son la idóneas para el puesto, pero también, más veces de las que se quisiera admitir, encaran ideas preconcebidas -conocidas como sesgos- por parte de las personas entrevistadoras, las cuales generan contrataciones poco igualitarias, injustas y hasta fallidas.

De hecho, los sesgos se presentan mucho antes de una entrevista de trabajo; desde la convocatoria o anuncio de la vacante, hasta la selección de las personas a entrevistar. En ello coincidieron Mauricio Reynoso, director general de Asociación Mexicana en Dirección de Recursos Humanos AC, y Tania Arita, gerente regional en Talent Solutions de ManpowerGroup, durante entrevista con Dalia Empower.

Los sesgos son evaluaciones o juicios inconscientes y automáticos sobre personas, situaciones o cosas. Es decir, ocurren sin que las personas se den cuenta que los tienen y en inglés se conocen como "bias". Existen distintos sesgos: de género, de raza, de edad, de apariencia física, etcétera. La mayoría de las personas los tienen y generan una visión parcial, estereotipada e inclusive engañosa de las personas. En el caso del mercado de trabajo, esa visión deja por detrás las habilidades y talentos de quienes buscan empleo, lo cual afecta su contratación y su éxito profesional.

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Las mujeres son con frecuencia la población más vulnerable en este tema. Una mujer tiene 30% menos probabilidad de ser citada para una entrevista de trabajo en comparación con un hombre de características similares (7.7% de mujeres contra 10.9% de hombres), de acuerdo con el informe ¿Tienen las Mujeres Menos Oportunidades de ser Contratadas?, realizado por la Universidad Pompeu Fabra.

Las mujeres, durante una entrevista, se enfrentan con más frecuencia a preguntas acerca de su vida y planes personales como maternidad, estado civil y otras situaciones que el entrevistador crea que influyen en su desempeño simplemente porque son mujeres. Ante ello, Reynoso y Arita brindaron algunos consejos sobre cómo actuar si detectas este tipo de actitudes por parte del o la entrevistadora:

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1 Pierde el miedo

Antes de acudir a una entrevista de trabajo, prepárate para preguntas de este tipo, para no quedarte en silencio u omitir estas acciones y saber cómo responder. “Obviamente hay mucha gente que tiene miedo. Miedo porque me están entrevistando y voy a perder esta oportunidad y precisamente ahora que hablábamos de las mujeres, las mujeres tienen mucho ese miedo en una entrevista de trabajo”, indicó Tania Arita, de Manpower.

Señaló que algunas personas temen perder una oportunidad de trabajo en caso de reaccionar y combatir estas situaciones, pero advirtió, si una empresa demuestra ese tipo de clima organizacional será muy difícil trabajar allí y no será la más idónea para que desempeñarse profesionalmente y crecer

"Sé que mucha gente puede reaccionar con miedo y decir: Bueno, voy a perder esa oportunidad. Pero yo también le digo, cuando doy esas capacitaciones, que si una empresa te está haciendo esas preguntas, imagínate cómo va a ser el infierno cuando ya trabajes adentro”, comentó.

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2 Señala el error

Si has detectado que el entrevistador está teniendo un sesgo por género, edad, orientación sexual, clase social o cualquier otra razón, señala el error en ese momento.

Puedes decir que prefieres no responder esa pregunta debido a que no está relacionada con tu experiencia profesional ni con tus habilidades, de forma que la persona se percate de su error, explica Arita. “Como candidata, puedes en ese momento manifestar que estás siendo violentada en algunas preguntas y también te puedes cerrar y no contestar". Así es como puedes bloquear a tu entrevistador.

Reynoso coincidió en que debes señalar de manera profesional que la pregunta es personal, de carácter privado y que está cargada de un sesgo, por lo tanto, prefieres no contestar. Si la persona que entrevista tiene un alto nivel de profesionalismo, se disculpará, continuará con el proceso de manera regular y omitirá ese tipo de preguntas. Pero, no siempre sucede así. “Si técnicamente [el empleador] tiene la madurez para manejar la situación, se dará cuenta e incluso [podrá] ofrecer una disculpa y continuar con otro tema”, afirmó.

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3 Reporta la actitud

Ya sea que no te hayas animado a señalar la situación durante la entrevista o que lo hayas hecho y la reacción no haya sido la esperada, puedes reportar a superiores o comités de ética de la empresa para que se tomen acciones al respecto.

“Si tu detectas algo así, pues no entrar en conflicto con el entrevistador y reportar la situación a la oficina ética que corresponda de esa empresa", mencionó el director de Amedirh. Y si no hay una oficina así en la organización, acude con la máxima cabeza de recursos humanos. El directivo dijo que muchas empresas ya cuentan con una política de inclusión y no discriminación, por lo que este tipo de quejas son facilitadas.

La gerente regional de Manpower Group comentó que este tipo de instancias en muchas ocasiones cuentan con buzones de quejas por internet o líneas telefónicas, donde puedes exponer tu caso.

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