La paridad en consejos de administración de empresas en México se alcanzará hasta 2057
Las mujeres representan 10% de las personas que integran los consejos de las 182 empresas que cotizan en bolsa en el país.
CIUDAD DE MÉXICO. Si las empresas mexicanas no realizan mayores acciones por incluir a más mujeres en sus consejos de administración y avanzan en esta materia al mismo ritmo que el actual, será hasta 2057 cuando se alcance la paridad en esos espacios de toma de decisión empresarial, de acuerdo con un informe del Instituto Mexicano para la Competitividad y el Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección, del Instituto Panamericano de Alta Dirección de Empresa Business School.
Para realizar el reporte, se analizaron 182 empresas que cotizan en la Bolsa Mexicana de Valores y en la Bolsa Institucional de Valores. El documento indica que 10% de las personas que integran hoy los consejos de administración son mujeres. En empresas que cotizan en el mercado de capitales, ellas representan 11 de cada 100 personas consejeras; en empresas que cotizan en el mercado de deuda, son 13 de cada 100.
Yvette Mucharraz y Cano, directora del Centro de Investigación de la Mujer en la Alta Dirección (CIMAD), explico que existen distintos tipos de consejeros, como los patrimoniales, que tienen recursos invertidos en la empresa; los relacionados, que tienen alguna relación con los propietarios, y los independientes, que son personas de probada experiencia y aportan sus conocimientos. Justamente es en este último rubro donde las organizaciones pueden sacar más provecho de la experiencia de las mujeres, mencionó Mucharraz y Cano. Sin embargo, las cifras dejan mucho que desear, pues su participación como consejeras independientes es de apenas 8% en empresas del mercado de capitales y de 10% en empresas del mercado de deuda.
Las mujeres tampoco tienen una representación amplia en los puestos de direcciones importantes o relacionados con toma de decisiones.
"[Esto] reduce la posibilidad de tener perspectivas diferentes en los puestos de toma de decisiones [...]; puede reducir la capacidad de innovación y puede con esto tener un impacto financiero [...] en las organizaciones y el país en general, porque es sistemático; están desaprovechando talento”, afirmó Fátima Masse, directora de Sociedad Incluyente del Instituto Mexicano para la Competitividad (Imco).
De las 547 personas que ocupan direcciones que se consideran relevantes -finanzas, jurídica y dirección general- en las 182 empresas empresas analizadas, únicamente 12% son mujeres. De hecho, 36% de la plantilla laboral de esas organizaciones es femenina, pero la representación se reduce en la dirección jurídica a 21%; en la de finanzas a 10% y en la dirección general a 4 por ciento.
Con respecto a las acciones que estas empresas están llevando a cabo en favor de la equidad de género, las mismas organizaciones reportan lo siguiente:
- 94% menciona que realiza capacitación continua
- 82% políticas de diversidad en los equipos de trabajo
- 72% programas de liderazgo
- 39% políticas de igualdad salarial.
- 35% promoción para que más mujeres participen en puestos directivos
- 37% refiere flexibilidad de horarios
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Masse enumeró una serie de acciones indispensables para alcanzar la paridad en las emrpesas:
- Generar datos con perspectiva de género que realmente busquen influir o guiar las políticas corporativas. Esto incluye un análisis fino para ver dónde se pierden las mujeres y por qué; lo que realmente permitirá autodiagnóstico interno y el diseño de acciones.
- Que la Comisión Nacional Bancaria y de Valores fortalezca los requisitos que las empresas deben cumplir, como pedir representación de mujeres en toda la estructura; un listado específico de políticas de equidad de género e inclusión, así como otros datos en la materia.
- Diseñar programas y políticas de armonización vida y trabajo, ofreciendo condiciones laborales que permitan responder a obligaciones en la empresa y en la vida personal.
- Implementar estrategias para fortalecer el crecimiento profesional en empresas como programas que incluyan mentorías, promoción y redes de apoyo que faciliten o sean útiles en la vida laboral de las mujeres.
- Impulsar inversiones con enfoque de género; por ejemplo, proyectos que busquen apoyar a las niñas o a las mujeres
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