La lista de pendientes de Inmujeres a 20 años de su fundación
El diálogo de Inmujeres con activistas y la autonomía del Instituto son algunos temas que feministas mexicanas discutieron en un foro.
CIUDAD DE MÉXICO. El Instituto Nacional de las Mujeres (Inmujeres) tiene retos importantes como implementar políticas de igualdad y hacer que lleguen a todo el país; incluir el trabajo con la diversidad sexual y racial, y lograr diálogo con todos los colectivos feministas, mencionaron feministas reconocidas.
“Las mujeres avanzamos siempre colectivamente y ninguno de los logros que alcanzamos sale de la nada; tenemos siempre detrás cientos de mujeres que han luchado en las calles, en sus propias casas, en las instituciones”, aseguró la presidenta del Instituto Nadine Gasman.
La funcionaria y otras líderes que han trabajado por el derecho de las mujeres se reunieron en el foro 20 Años Caminando Juntas: de Beijing a la Creación de Inmujeres, evento en el que hicieron un recorrido histórico desde su asistencia al foro internacional por los derechos de las mujeres en 1995 en China y la creación del Instituto en 2001, hasta la situación actual.
La Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer, celebrada en septiembre de 1995 por la ONU en Beijing, fue un parteaguas y sigue siendo un referente y una guía sobre los derechos de las mujeres en todo el mundo, pues no solo tuvo una asistencia sin precedentes -17,000 participantes y 30,000 activistas- sino porque al final se emitió la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, el plan más progresista que jamás había existido para promover los derechos de la mujer.
Gasman señaló que identifica tres desafíos fundamentales en el Instituto Nacional de las Mujeres: la implementación del Programa Nacional de Igualdad (ProIgualdad) y que su cobertura alcance a todas las mujeres y niñas; así como fortalecer el diálogo con los movimientos de mujeres en el país que se han incrementado en años recientes.
Sergia Galván, feminista, observó otros retos adicionales. Entre ellos, hacer frente a los grupos conservadores y religiosos que se oponen al avance de los derechos de las mujeres.
“Superar amenazas permanentes a esta agenda de Beijing por parte de los antiderechos, a las iglesias, y establecer estados verdaderamente laicos […] el primer quinquenio tuvimos que enfrentarnos a estos grupos, no para hacer avanzar nuestra agenda, sino simplemente para no retroceder”, indicó.
Las participantes pusieron sobre la mesa la pertinencia de hacer un cambio en la figura jurídica sobre la que actualmente opera Inmujeres, que es un organismo descentralizado de la Secretaría de Gobierno.
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Flor Desireé León Hernández, presidenta del Instituto de la Mujer del Estado de Morelos, aseguró que existen en el país 10 de secretarías de las mujeres y los demás son institutos, de los cuales algunos fueron creados por ley orgánica y otros por decreto.
Pero en Morelos nació como órgano autónomo y eso le ha dado la facilidad para operar y tener capacidad crítica ante las acciones del gobierno. Por ello, es un ejemplo.
Aunque Ingrid Gómez Saracíbar, secretaria de las Mujeres de la Ciudad de México, afirmó que la ventaja de la secretaría es la cercanía con el resto de las secretarías y organismos así, como la capacidad operativa.
La senadora Martha Lucía Micher Camarena mencionó, por su parte, que estas instituciones especializadas tienen que estar llamadas a desparecer, pues el destino de la política pública es fortalecerse en temas de igualdad y perspectiva de género a tal grado que un instituto o secretaría de las mujeres sean innecesarias.
“Para mí, los institutos tienen que desaparecer ¿Qué quiere decir eso? Que en determinado momento la política de igualdad esté incorporada en toda la política de gobierno y, por lo tanto, los institutos únicamente tendrían que ser supervisores o crear supervisiones en el interior de las instituciones para que la política de igualdad se haga”, aseguró.
La feminista Teresa Incháustegui dijo que la desaparición no es la línea que se debe seguir, sino un crecimiento de capacidad técnica y de profesionalización para que se consolide.
Paloma Bonfil Sánchez, coordinadora Nacional de Antropología, aseguró que una de las cuestiones más valiosas de Inmujeres ha sido la creación de instituciones estatales y municipales, por lo que deben trabajar para que éstas también estén robustecidas y funcionen correctamente.
“Espero que esta institución, junto a sus pares en los estados y los municipios, se refuerce y no sean solo cascarones, no sean solo un banco, no sean una oficina como hoy se puede ver en muchos municipios”, afirmó.
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