CIUDAD DE MÉXICO. De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) las mexicanas ganan 14% menos que los hombres. Sin embargo, pagan más que los hombres por algunos productos debido al llamado “impuesto rosa” y además suelen erogar más recursos por productos de belleza con el objetivo de cumplir ciertos cánones estéticos establecidos por el entorno, que imponen las reglas de cómo debe verse una mujer.

¿Cuáles son los números y los datos detrás de las diferencias en el consumo y gasto entre mujeres y hombres?

El impuesto rosa

Pese a su nombre, no se trata de un impuesto, sino de un sobreprecio que se aplica a los productos dirigidos a niñas y mujeres en comparación con los de niños y hombres.

Según la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), generalmente se relaciona a los productos asociados con la higiene personal como desodorantes o rastrillos.

En agosto de 2019, la dependencia informó que el aumento en el costo de los productos se relaciona a que la marcas invierten más dinero en la presentación de productos, diseño y empaque dirigidos para mujeres. Sin embargo, en muchos de los productos las características son iguales y solo cambia el color (a rosa) y la etiqueta.

Una búsqueda realizada por Dalia News+Media en supermercados de la Ciudad de México y sitios de venta online, encontró que esas diferencias de precios en productos similares:

Diferencia de precios entre rastrillos para hombre y mujer.

Esto no ocurre solo en productos, también es algo que pasa en los servicios. Por ejemplo, el corte de cabello para mujeres suele tener un costo mayor que el de hombres, sin importar el largo.

Precios corte de cabello, estética CDMX.

En los servicios financieros pasa algo similar. En agosto de 2019, la Comisión Nacional para la Protección y Defensa de los Usuarios de Servicios Financieros (Condusef) realizó un ejercicio comparativo para ver las diferencias en el coso total para un hombre y una mujer de 30 años en la contratación de un seguro de gastos médicos individual con cobertura básica.

En la aseguradora GNP, con una suma asegurada de 100 millones y un deducible de 10 mil pesos, el costo para los hombres anualmente sería de 17,347 pesos; mientras que una mujer pagaría 24,305 pesos.

Lo mismo ocurre en seguros Inbursa, donde por una suma de 40 millones y con un deducible de 9,500 pesos, el costo anual para una mujer es de 16,071 pesos y para un hombre de 12,104.

La dependencia señala que, a diferencia de los productos de higiene, este aumento responde a que las aseguradoras parten del supuesto de que las mujeres viven más años que los hombres y son más propensas a las enfermedades.

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Estándares de belleza y su impacto

Las mujeres son sistemáticamente presionadas para cumplir estándares de belleza. Ser delgadas, usar maquillaje y depilarse el cuerpo, son algunas de esas exigencias sociales.

Si bien los feminismos se encuentran en una lucha activa por desmontar esos estándares de belleza y por naturalizar cosas tan simples como que las mujeres tienen vello corporal y depilarlo es una decisión personal, la realidad es que las mexicanas gastan grandes sumas de dinero en productos y servicios de belleza.

Cuánto gastan en belleza

Un informe de 2016 realizado por la empresa estadounidense de datos y medición Nielsen, informaba que las mujeres en México gastan 12 de cada 100 pesos en productos de belleza.

Un año más tarde, un estudio realizado por el Departamento de Investigación de Merca2.0, encontró que 29.2% de las mujeres del país gastaba entre 251 y 500 pesos en maquillaje por compra y 19.5% erogaba entre 501 y 750 pesos.

De acuerdo con la Cámara Nacional de la Industria de Productos Cosméticos de México (Canipec), en 2018 el sector tuvo un crecimiento de 4.7%, con un valor de mercado del sector de cuidado personal de 187,776 millones de pesos.

En este sector se incluyen productos de maquillaje, depilación, cuidado de la piel y el cabello o fragancias.

La ‘belleza’ y el salario

'Verse bien', de acuerdo con los estándares socioculturales tiene otro impacto negativo de enorme relevancia: el nivel de ingresos.

Un estudio realizado por sociólogos de la Universidad de Chicago y de la Universidad de California, encontró que las mujeres atractivas reciben ingresos 20% superiores que los de las mujeres promedio.

Este estudio, retomado por la revista Harper’s Bazaar, fue realizado a 14,000 personas de ambos sexos en Estados Unidos. Los investigadores encontraron que las personas atractivas eran consideradas más inteligentes, confiables y cooperativas.

Pero ahí no terminan las malas noticias. El impacto del sobrepeso a nivel profesional es distinto entre hombres y mujeres.

Otro estudio, realizado por los investigadores Raymundo Campos del Colegio de México y Roy Núñez de la Universidad de las Américas Puebla, reveló que las mujeres con obesidad ganan 9% menos que las mujeres con cuerpos normativos. Si tienen obesidad severa la cifra aumenta a 16.7 por ciento.

En comparación con los hombres, las mujeres con sobrepeso perciben 26% menos salario que ellos y si tienen obesidad ganan 29% menos.

¿Qué pasa con las cirugías plásticas?

A nivel mundial, son las mujeres quienes más gastan dinero en cirugías plásticas. Datos de la Sociedad Internacional de Cirugía Plástica Estética (ISAPS, por sus siglas en inglés), muestran que las mujeres representan 86.5% de las cirugías plásticas realizadas en 2018.

En México, la liposucción, el aumento de senos y la cirugía de párpados fueron los procedimientos quirúrgicos más comunes. Entre los no quirúrgicos, los favoritos son la aplicación de botox y de ácido hialurónico.