CIUDAD DE MÉXICO. En el Día Internacional de la Niña, el 11 de octubre, la población infantil mexicana que pertenece a ese segmento no tiene mucho que celebrar, pero sí mucho que exigir, de acuerdo con los principios que inspiraron esta fecha creada por la Organización de las Naciones Unidas en 2011.

La pobreza y la violencia integran el entorno bajo el cual vive una gran parte de las niñas en México.

De acuerdo con cifras de Coneval al 2018, 49.6% de la población menor de 18 años se encuentras en condiciones de pobreza moderada y extrema. Y aunque no hay un desagregado por sexo, otro dato evidencia el impacto en niñas y adolescentes mexicanas: 42.4% de las mujeres del país se halla bajo esa misma condición, un número más alto que el de la población masculina, donde la proporción es de 41.4 por ciento.

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Tampoco se han podido sustraer de la violencia que por años ha asolado al territorio nacional. Una muestra de ello son los feminicidios y las desapariciones.

Tan solo de 2018 a 2019, los feminicidios de niñas y adolescentes se incrementaron 13 por ciento. Hoy, en promedio, hay ocho casos diarios, de acuerdo con la Red por los Derechos de la Infancia en México (Redim).

La misma organización reveló hace unas semanas que la cifra de niñas, niños y adolescentes desparecidos hasta agosto pasado ascendía a 17 mil 312, con siete desapariciones diarias en promedio contra cuatro hace dos años.

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Recientemente también se dio a conocer que hay 18 mil 258 mujeres y niñas desaparecidas y no localizadas, según el informe sobre Búsqueda, Identificación y Versión Pública del Registro de Personas Desaparecidas, presentado por la Secretaría de Gobernación en julio.

La mayoría de ellas, 5 mil 397, se ubican entre los 15 y 19 años de edad.

Si hablamos de violencia sexual, tan solo en el tema de pornografía infantil México se ubica en el primer lugar de difusión, de acuerdo con un reporte de la ONU en 2017. Y se ha reconocido que las niñas son un grupo especialmente vulnerable a la explotación sexual.

Los números muestran una incapacidad del Estado mexicano para garantizar los derechos humanos de su infancia y, en este caso, de las niñas. Ante la irrupción de la pandemia del virus de COVID-19 y la crisis económica que ha generado, este escenario puede empeorar todavía más.

La ONU ha estimado que a raíz de la pandemia por lo menos 96 millones de personas entrarán en pobreza extrema, de las que 47 millones serán mujeres y niñas.

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Por otra parte, la organización humanitaria Plan Internacional alertó en junio que la crisis sanitaria hará retroceder varias décadas los avances alcanzados en educación para las niñas en América Latina y el Caribe, debido a la reducción de ingresos en las familias.

En México, la misma Guarda Nacional estimaba en mayo que en los primeros dos meses de la crisis sanitaria el tráfico de pornografía infantil registró un incremento de 73 por ciento.

¿Por qué se celebra este día y cuál es el llamado?

El Día Internacional de la Niña fue instaurado por la ONU el 19 de diciembre de 2011 con el objetivo de reconocer los derechos de ese segmento de la población y los problemas extraordinarios a los que se enfrenta en todo el mundo.

La premisa es proteger esos derechos e impulsarlas a las niñas y adolescentes para avanzar hacia un futuro más igualitario y próspero. De hecho, el lema bajo el cual se conmemora la fecha este 2020 es: "Mi voz, nuestro futuro en común".

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Para promover los derechos de las niñas -y también de las mujeres- se creó hace 25 años la Declaración y Plataforma de Acción de Beijing, un marco de políticas establecido durante la Cuarta Conferencia Mundial sobre la Mujer.

La Declaración hace un llamado mundial a:

1. Eliminar todas las formas de discriminación contra las niñas.
2. Eliminar las prácticas y los comportamientos negativos contra ellas.
3. Promover y proteger sus derechos y reforzar la concienciación sobre sus necesidades y su potencial.
4. Eliminar la discriminación contra ellas en el ámbito de la educación, el desarrollo de habilidades y la formación.
5. Eliminar la discriminación en el contexto de la salud y la nutrición.
6. Eliminar la explotación económica del trabajo infantil y proteger a las niñas en el trabajo.
7. Erradicar la violencia en su contra.
8. Alentarlas a tomar conciencia de la vida social, económica y política y participar en ella.
9. Fortalecer el papel de la familia para mejorar su condición.