7 pasos para escuchar tu sabiduría interna
¿El autoconocimiento es una necesidad para ti y tu guía al tomar decisiones? Sobre esto escribe Viviana Alcocer, experta en desarrollo integral.
Sabiduría interna… este es uno de los recursos más valiosos que tenemos y uno de los que menos usamos. Tal vez varias veces te han dicho: sigue tu intuición: escucha tu corazón. Pero frecuentemente no confiamos en ellos; dudamos de nosotros mismos.
Creo que la vida tiene un lado misterioso. Hay temas acerca de la naturaleza, la energía, la espiritualidad, la religión que no se han explicado, pero tu sabiduría interna puede comprenderlas gracias a esta inteligencia innata que te guía en la vida.
¿Cómo puedes aprender a escucharla? Aquí te comparto 7 pasos:
1 Mantén la calma
Cuando estamos con mucho ruido interno, agobiados o atormentados por algo, será difícil escuchar nuestra sabiduría interna. Encuentra maneras efectivas de bajar tu acelere y estar en calma para poder escuchar tu voz interna.
Algunas prácticas que te pueden servir son meditar, escribir (journaling), rezar, hacer ejercicio u otra actividad física. Todas estas actividades pueden ayudarte a relajarte, disminuir tu ruido interno y abrir un espacio para escuchar tu sabiduría interna.
2. Entra en contacto con tus sentimientos
¿Cómo te sientes? Esa es la brújula de tu vida. Y aquí no solo hablo de la emoción del momento, sino de cómo te sientes de manera consciente y duradera.
Estar consciente de tus sentimientos, te ayuda a identificar tus verdaderos deseos y también cuáles situaciones, personas o pensamientos te provocan emociones como alegría, miedo, tristeza, preocupación, angustia, etcétera.
Cuando constantemente buscamos nuestro norte o brújula externamente, acabamos agotados, sin rumbo y sin saber qué queremos. En realidad, las respuestas las tenemos dentro.
Si hay un sentimiento recurrente en tu vida, haz una lista de las situaciones y emociones sobre las cuales basas el sentimiento y pregúntate cuatro o cinco veces por qué te sientes así en relación con esta situación.
Al final, nuestros sentimientos dependen de cómo interpretamos nuestra realidad y a veces confundimos prejuicios o expectativas externas con nuestros verdaderos deseos.
3 Presta atención
Piensa en todas las interacciones y estímulos que tienes durante el día. Estos generan un pensamiento que después genera una idea y eventualmente una acción. Este ciclo lo hacemos de manera inconsciente, pero la vida está llena de detalles, coincidencias, ideas, probabilidades. Cada día es un nuevo comienzo, trae su propia energía.
Descubre cuáles de estas interacciones son las que acaparan tu atención; qué emociones y pensamientos despiertan en ti.
Cuando tu sabiduría interna quiere que empieces algo, empezará a enfocar tu atención a aquellas situaciones que son más importantes para ti… Escúchala porque sabe de qué está hablando.
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4 Haz tu parte sin obsesionarte con el resultado
No sé si te ha pasado, pero cuando yo quiero obtener algo, si pongo todo mi empeño, atención y energía en conseguirlo, la mayoría de las veces lo alejo más.
Con frecuencia lo que mejor te funciona es saber lo que quieres. Después, identificar cuáles elementos están bajo tu control y cuáles no. Esto te ayuda a enfocar tu energía en lo que sí puedes controlar y a confiar en que el resto (lo que no controlas) pasará como tenga que pasar.
Así, sea cual sea el resultado, tu sabiduría interna encontrará una solución o la manera de adaptarse a la nueva situación.
Esto te ayudará a mantener la calma y enfocar tu energía y pensamientos de manera efectiva en temas que puedes controlar. En lo que no puedas es mejor no desgastarte. No te angusties por la incertidumbre del futuro.
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5 Acepta lo incierto y efímero de la vida y encuentra la belleza colateral
La falta de control de la mayoría de las circunstancias y eventualmente el miedo a la muerte, son dos de los factores que más angustia y miedo nos generan. Provocan mucho “ruido interno”, el cual nos puede impedir escuchar nuestra sabiduría interna.
Aceptar este hecho de la vida e identificar los sentimientos que nos causa, es un primer paso para evitar tomar decisiones por miedo y vivir más plenamente.
De forma adicional, la vida nos presentará siempre eventos tristes. Pero cada uno trae un regalo que no podríamos tener si no estuviéramos viviendo esa situación. Abraza y acepta tus sentimientos de tristeza, enojo, pérdida o duelo, y también aprecia la belleza colateral de esa vivencia y las probabilidades que puede generar en tu existencia.
Muchas personas, después de sufrir una pérdida, enfermedad o accidente, cambian de rumbo y encuentran una dicha y plenitud que no esperaban. Ellos experimentan la belleza colateral.
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6 No te tomes a ti ni a la vida tan enserio
¡Cuánta falta hace tomarnos la vida y a nosotros mismos menos en serio! La mayoría de las situaciones tienen solución y las que no, en muchas ocasiones, son inevitables.
Mientras seguimos aprendiendo a escuchar nuestra sabiduría interna, veamos a la vida como un experimento y hagamos el compromiso de vivir lo mejor posible.
Analiza en retrospectiva tu pasado pero solo para aprender y no para juzgarte, considerando que las decisiones que tomaste en el momento fueron las mejores que pudiste tomar con los recursos y nivel de conciencia que tenías.
7 Haz del autoconocimiento una necesidad
El autoconocimiento es una parte esencial de tu felicidad. A cualquier edad y en cualquier lugar donde vivas, siempre estarás contigo mismo. Tú eres la persona más importante en tu vida; quien toma las decisiones y actúa cada día. Así que comprométete a descubrirte, a conocer lo que quieres y actuar en tu mejor beneficio.
Priorizar la relación contigo mismo ayudará a tu bienestar, plenitud y felicidad, y comprobarás que será una de las mejores decisiones de tu vida.
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