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CIUDAD DE MÉXICO. Cada inicio de año, tanto personas como empresas solemos planear nuestros objetivos de negocio y profesionales para los siguientes 12 meses, pero una planeación estratégica a corto plazo no es suficiente para alcanzar el éxito sostenible. Eso requiere una planeación de largo plazo que tome en cuenta las tendencias y los escenarios cambiantes que existen hoy.

Yanira Matienzo, directora de innovación y educación de LUAN Emotional Museum, explicó que una planeación de largo plazo toma en cuenta lo que sucederá en el tiempo y con ello se toman decisiones sobre el largo plazo.

Aunque en muchas ocasiones las personas evitamos pensar en el futuro porque suele generarnos emociones como ansiedad o incertidumbre, es crucial hacerlo y planear a largo plazo, pues así estaremos mejor preparadas para lo que suceda, tendremos un mayor nivel de certeza y podremos encontrar oportunidades de crecimiento y logro de metas.

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“Lo que hace pensar el futuro con esta perspectiva es que, por un lado, te ayuda a navegar mejor el cambio es decir, hay una mejor aceptación y confianza personal; agencia para poder decir: 'Puedo lidiar y puedo ir resolviendo lo que suceda'. Entonces, eso es maravilloso. Dos: te permite tener una gran... encontrar oportunidades creativas”, indicó Matienzo en entrevista para Dalia Empower.

Dalia Empower es el movimiento que busca cerrar la brecha de género a través de la transformación del liderazgo con programas de capacitación -para personas y para empresas-, especializados en life skills (soft skills) como la comunicación, la empatía, la negociación o la creatividad.

“Los riesgos de no pensar el futuro es tomar decisiones cortoplacistas y meternos en más problemas de los que ya estamos, y el riesgo de solamente pensar a largo plazo es que entonces puedes perder el piso de lo que está sucediendo todo el tiempo en tu propia realidad”, sentenció.

Yanira aseguró que ante ello es necesario hacer una planeación sobre lo que está sucediendo en el momento tal y como se ha hecho siempre, pero también una planeación hacia el futuro, considerando diversos parámetros como la situación social, política y económica, y las posibles maneras en que estos parámetros se moverán.

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Para prepararte hacia el futuro y desarrollar una mente visionaria, comienza a realizar estas cinco acciones que nos explica Yanira Matienzo:

1 Piensa en plural; piensa en "los futuros"

Matienzo, quien también es speaker del programa ADN de liderazgo, desarrollo profesional y personal de Dalia Empower, aseguró que una de las razones por las cuales falla la planeación a largo plazo es que las personas evitamos pensar en situaciones sobre las cuales no tenemos certeza. Eso sucede con el futuro, pues existen múltiples posibilidades de lo que podría pasar, pero no podemos cambiar.

“No nos gusta no tener control, no nos gusta no tener certeza. Entonces, siempre, de alguna manera, nuestro propio cerebro está buscando protegernos y trata de ahorrar energía. Entonces, tenemos que hacer un esfuerzo adicional, de poder pensar fuera de la caja, de atrevernos a imaginar y no tacharnos a nosotros mismos como locas o locos, y ése es un primer componente: la posibilidad de hacer consciente que nos es difícil”, señaló la especialista, quien imparte el módulo Aprendizaje para un Futuro Acelerado del programa ADN de Dalia.

Por otra parte, tenemos que dejar de hablar de "un futuro”, en singular. En realidad los escenarios cambiantes abren muchas posibilidades sobre lo que puede suceder y, por lo tanto, debemos contar con la preparación para esas posibilidades. “Cuando hablas de futuros, nunca lo hablas en singular, lo hablas en plural. Hablas de futuros porque hay 'ene' cantidad de posibilidades todo el tiempo”, afirmó.

Estimar esas posibiliades con base en los diversos factores personales y sociales que pueden influir, nos puede permitir anticiparnos a lo que sucederá.

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2 Toma en cuenta tus emociones

Pensar sobre futuros puede ser abrumador o agobiante, por lo que muchas personas evitan hacerlo, como mencionó Matienzo. Sin embargo, rechazar la planeación a largo plazo y las emociones que genera, es un error.

Pese a que el miedo a lo que vendrá y la falta de certeza pueden paralizarte, enfrentarlo es la única forma de comenzar a actuar, advierte la experta. Debemos informarnos de lo que sucede alrededor en la actualidad para estimar cómo serían los escenarios y así desarrollar tácticas de acción.

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“No sabes la cantidad de veces que he escuchado la gente decir: 'No, yo no quiero pensar en el futuro porque: '¡Qué miedo! ¡qué miedo me da!'. O, '¡me siento súper desactualizado y no sé cómo!'. ¿Qué hacen al respecto? O se sienten como paralizados y dicen: 'Yo prefiero enfocarme en el presente porque es lo único en donde hay que vivir'. Entonces, creo que hay también muchos riesgos en sentir como si el futuro no fuera real o no pudiera ser importante imaginarlo”, mencionó Yanira Matienzo.

3 Imagina y anticipa riesgos

La experta señaló que pensar en los posibles futuros que existen te permite también buscar posibles soluciones a los problemas, así como imaginar formas distintas de enfrentar los retos y buscar áreas de oportunidad. En resumen, este ejercicio permite abrir la imaginación.

“La imaginación nos ayuda a anticiparnos a riesgos importantes, en vez de acabar siendo dañados porque nadie hizo caso a su imaginación y entonces ¿qué pasó? Y entonces, nadie reguló […]. Es un gran proceso de imaginación. Es un gran proceso, de verdad, dejarnos sentir ridículos; sentir aquello que es imposible. Porque [entre] más lo piensas, si lo juegas, más te das cuenta que no es tan imposible”, señaló.

A través de la imaginación, dijo, podrás detectar oportunidades de negocio o de crecimiento en los distintos escenarios de futuro. Imaginar, sostuvo, también empuja ideas creativas que, de otra manera, no se hubieran generado.

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4 Planea en colectivo

Matienzo sostuvo que las planeaciones hacia el futuro se deben hacer en equipo porque así se consiguen más y mejores ideas, así como posibles soluciones.

Un buen liderazgo siempre debe estar preparado para el futuro, de manera que sepa actuar ante lo que se presente y no lo tome totalmente de sorpresa. En las organizaciones, quienes llevan roles de liderazgo deben realizar sesiones con sus equipos para revisar en conjunto panoramas y tendencias actuales, y visualizar posibles escenarios. Con la opinión e ideas de todas las personas de distintas áreas, los liderazgos pueden prever y planear.

“Tener sesiones colectivas con los equipos y poder conversar, y dejarse de forma muy abierta y muy amable. Pensar en todas esas señales que estamos viendo; ¿qué significan para los proyectos, para el negocio para la vida personal? Ahí, hay gran riqueza porque el futuro es algo colectivo; entonces, esa capacidad de poder hacerlo así es fundamental”, indicó.

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5 Experimenta con las opciones

A partir de esas planeaciones, el liderazgo puede obtener una matriz con los posibles escenarios, lo que está impactando a cada uno y lo que sucedería. Como resultado, tendrá varias opciones de acción y decidirá cuál o cuáles explorar.

“Me parece que también es muy, muy, muy rico, el hecho de que uno pueda como líder tener una matriz de decisiones en la que sea capaz de decir: 'Bueno, ahorita ¿qué es lo que quiero explorar?; ¿qué me interesa?; ¿qué futuros estoy viendo?”, comentó.

Por ejemplo, dijo, si se observa que la inteligencia artificial será una herramienta que cambiará la industria, se puede decidir comenzar a experimentar con ChatGPT, conocer su influencia, impactos y los cambios que puede ocasionar al interior de la organización.

“Poder tener esa capacidad de decidir estratégicamente con qué quiero experimentar y con qué empiezo a jugar para poder yo sentir esos cambios. Entonces, que no me hablen de blockchain, voy a ir a a entender, qué significa eso que es una criptomoneda. O, no sé; escucho mucho que hay problemas de temas de salud mental o de soledad en la sociedad, pues voy a platicar con la gente, voy a ir a sentirlo yo, a ver si ahí está y, entonces, así se conforma esa sensibilidad; a través de la exploración”, indicó.

Con esto se anticipa a los escenarios que se van a presentar, pues está haciendo frente a lo que, en caso de no tener esta planeación, más tarde podría generar una situación de emergencia o cambios importantes ante los que desconozca cómo actuar.

“Si te vuelves más sensible, si te atreves a explorar y a jugar, entonces empiezas a construir una visión que te ayuda a ser un líder transformador, un líder a largo plazo; no solamente un líder que apaga los fuegos del día a día”, afirmó