Para Enrique Olvera, parte fundamental de la de la cocina es compartir. En esta lección, nos cuenta los detalles más importantes de cómo se ha convertido en uno de los chef más famosos de México. Su fama de atención al detalle y la excelencia no es lo único que lo caracteriza. Aquí podrás conocer muy de cerca cómo ha evolucionado su marca. Hablaremos de su manera de hacer las cosas y cómo, a través de su trabajo, transmite al mundo el orgullo de ser mexicano.

“Soy Enrique Olvera. Nací, crecí, me reproduje y me quiero morir en México”. Así comienza esta lección, donde el chef compartirá su viaje con nosotros, el cual él mismo define como 'una historia de persistencia'". Veremos cómo han ido evolucionando sus negocios, contará cómo llegó a hacer lo que hace, su experiencia en la Escuela de Cocina de NYC y cómo con sólo 24 años decide entrar en un '"diálogo de la nueva cocina mexicana'" con la inauguración de Pujol en el año 2000."

Cada restaurante de Enrique Olvera es un caso diferente de adaptabilidad porque cada estilo y cada mercado es diferente. Hay que ser flexible, mientras replicas tu filosofía de marca, si no te adaptas, la marca puede morir.

“En la vida y en los negocios, uno no puede ir nada más midiendo riesgos. Creo que más bien que tomas decisiones por certidumbres” dice Enrique Olvera. Conoce el mercado y a tu cliente, prueba tu producto, así minimizas riesgos.

Hacer las cosas bien e ir elevando la barra de calidad es el pilar fundamental de Grupo Olvera y a través de ello revoluciona la industria.

Conoce a la mano derecha de Enrique Olvera en Pujol. Ella es Eréndira Díaz, su General Manager. Para ella, trabajar con Enrique se trata de disciplina, evolución, diálogo, coucheo, sustentabilidad y comercio justo.

“Es muy lindo cuando, de repente haces un plato y dices: Este soy yo y yo me veo en ese platillo” dice Enrique Olvera. Mensajes poderosos como éste nos explican lo importante que es imprimirle tu sello personal a tu marca. Debemos reconocer que nadie hace algo realmente bien si no le gusta o con lo que no se siente identificado.

El fracaso no es negativo y, de hecho, te hace ver qué posibilidades hay más allá de un proyecto que no tuvo el éxito que deseabas. Sin duda, para todos el fracaso es parte de la vida y ésta es un ciclo de subidas y bajadas. De todo se aprende.

Uno de los principales aprendizajes de la experiencia de Enrique ha sido que la mayor sofisticación está en llevar al máximo nivel de calidad, lo simple de la cocina mexicana. Propone que hablemos de los tipos de maíces en su tierra a la altura de las cepas de vinos europeos y, ¿por qué no?

En esta pintoresca lección, conocerás a Lucio Usobiaga, director del proyecto Arca Tierra. Desde sus tierras en Xochimilco nos cuenta cómo es trabajar con Enrique Olvera, quien, 'además de ser un excelente cocinero, conoce bien los procesos agrícolas y eso quiere decir, sobre todo, cuidar bien el suelo porque es el origen del sabor, el origen de la nutrición”."

Para Enrique Olvera el ADN de una marca se construye a través del tiempo y siempre tiene posibilidad de cambio. Por ejemplo, en sus inicios, Pujol buscaba ser un buen restaurante de barrio; hoy su objetivo es dar continuidad a la cultura mexicana.

“En este negocio todo mundo tiene que ganar; es la manera en la que haces que el restaurante sea sustentable [...] mi trabajo es tratar de repartir bien el pastel; que todo mundo gane; que todo mundo se lleve una buena tajada”, dice Enrique Olvera.

En este Dalia Masters, Enrique cocinó junto a Alex Bremont, jefe de cocina de Pujol, dos platillos del menú de degustación de tacos. Desde Casa TEO, disfruta (y aprende) en esta lección de la preparación del primero: el taco de Amaebi. Quedó delicioso!

Ahora toca saborear el segundo platillo del día. Veamos cómo el chef va paso a paso en esta creación tan exquisita con ingredientes como chile de agua, aguacate quemado, almeja generosa, algas, pico de gallo y callo de hacha.