¿Por qué hay mexicanas que temen o rechazan asumirse como feministas?

Estereotipos creados y una deficiente educación generan el rechazo de las mujeres al feminismo, aunque apoyen el mismo estandarte.

Foto: Pixabay
Foto: Pixabay

CIUDAD DE MEXICO. En México y en varios países cada vez son más las mujeres que apoyan la igualdad de género. Basta ver cómo ha aumentado el trabajo que las líderes de gobierno o empresarias del mundo llevan a cabo en esta agenda -que es el estandarte del movimiento feminista-, así como el apoyo prácticamente unánime que reciben de otras mujeres. No obstante, con mucha frecuencia, rechazan asumirse feministas. ¿Por qué?

Desde España, Rosa Márquez coautora de ¿Qué coño está pasando?, documental de Netflix sobre la agenda feminista, comentó en entrevista para Dalia News+Media que se ha distorsionado el significado de lo que es ser feminista.

Cursa en Dalia Masters: Storytelling: controla tu narrativa, con los productores de la serie Monarca de Netflix, Billy y Fernando Rovzar

“¡Eres feminista si crees en la igualdad!”, pero observa que muchas mujeres tienen miedo a asumirse en ese sentido.

Ericka López Sánchez, profesora-investigadora de la Universidad de Guanajuato, cuya línea de investigación es género y democracia, coincide en que, aunque las mujeres apoyen y exijan la igualdad de género, es más cómodo para ellas no asumirse feministas para no ser asociadas con una imagen estereotipada muy específica.

También te puede interesar el Programa ADN: Detona tu verdadero potencial

Una encuesta del Pew Research Center sobre igualdad de género, realizada en Estados Unidos entre marzo y abril de 2020, reveló que cada vez más ciudadanos de aquel país apoyan la igualdad de género, aunque no se identifiquen como feministas.

El levantamiento -entre 3143 adultos- mostró que 79% de quienes participaron dijo que era muy importante que los derechos de las mujeres sean iguales a los de los hombres.

No obstante, quienes se identifican como feministas son personas más críticas y exigentes en cuanto a la importancia y avances en igualdad.

Por ejemplo, en el grupo de personas que se identifican como feministas, 89% consideró que es muy importante que los derechos de las mujeres sean iguales a los de los hombres. Y 74% mencionó que su país no ha ido tan lejos en otorgar esos derechos.

En comparación, en el grupo de personas que no se identifican como feministas, 69% expresó que es muy importante que los derechos de las mujeres sean iguales a los de los hombres y 39% consideró que Estados Unidos no ha hecho lo suficiente en la materia.

El levantamiento se realizó entre 1,561 mujeres y 1,582 hombres de 18 años y más, e incluyo personas afroamericanas e hispanas.

La 'mala fama' histórica del feminismo

Esa imagen tiene que ver con estereotipos creados en torno a este movimiento social, que han surgido desde una carencia de educación sobre el tema hasta lo que la estructura de poder económico y social dice sobre las feministas.

Algunos de los estereotipos más comunes es que las feministas no se depilan, llevan la cabeza rapada, se visten como hombres y odian a los hombres, entre otros.

Lo cierto es que, desde la época de las sufragistas, a principios del siglo XX, las activistas también enfrentaron el rechazo de familiares, amigos, compañeros de trabajo, vecinos y prensa por exigir algo que no era propio de las labores de las mujeres: el derecho a votar. Incluso en esos años también se especulaba sobre sus preferencias sexuales.

Lee más: Las mujeres de la primera cumbre feminista mexicana de 1916 y su primer "escándalo"

Hace unos días, Amnistía Internacional (AI) advertía en un reporte la violencia policial que se ha venido operado de manera consistente en el país contra las protestas feministas, la mayor parte de ellas, pacíficas.

“El estigma sobre las manifestaciones feministas y contra la violencia de género, se basa en y refuerza estereotipos contra las mujeres, es decir, roles y concepciones tradicionalmente asignados por la sociedad a las mujeres”, destaca el documento que señala que las manifestaciones feministas son estigmatizadas como violentas.

Discursos como las mujeres “deben quedarse en casa” estigmatizan a las feministas, generan un "ambiente hostil a su derecho de reunión, deslegitima su activismo y facilita que tanto autoridades como particulares ejerzan violencia en su contra", dice AI.

López Sánchez, doctora en sociología, cita el libro Barbie, un estereotipo tóxico, en el que la autora Araceli Barbosa critica el estereotipo de feminidad de la famosa muñeca de Mattel. Y acusa que se trata de una representación errónea de los valores de género, raza, sexo y clase de la cultura estadounidense.

Como resultado, explica la académica, la mujeres buscan ser “políticamente aceptadas” con base en los roles que el patriarcado le ha asignado. Por ende, buscan también ese matiz entre la igualdad de género y el feminismo abierto.

“Tenemos que destruir estas nubes que el patriarcado ha puesto alrededor del feminismo", dice la socióloga.

La documentalista española coincide en esto también y señala que las mujeres tienen miedo de asumirse libremente porque se les ha hecho creer que las feministas son “son muy radicales y odian a los hombres”.

Para Rosa Márquez, el fomento de estas ideas nace de intereses creados para boicotear la causa feminista.

El objetivo, menciona, es "perpetuar todavía un sistema que sigo oprimiendo a las mujeres y que sigue manteniendo la desigualdad social. Y el feminismo es una lucha por la justicia y en ese punto es muy difícil no reconocerse como mujer y feminista”.

Recomendamos: El aborto es la batalla más grande del feminismo: Margo Glantz

Cómo transitar al feminismo

Para avanzar en el feminismo hay que hacer mucha pedagogía, dice Rosa Márquez, para para desmontar todos los “argumentos falaces y falsos que están impidiendo avanzar al movimiento”, pues las mujeres no están pidiendo imposibles, sino derechos fundamentales.

“Las reivindicaciones feministas son una serie de historias de éxito... hemos hablado del voto, pero también te podemos hablar de la educación, de llegar a puestos de poder, y todo eso lo hemos ido consiguiendo. Como el aborto o una serie de derechos que hemos adquirido a través de la lucha, siempre de una manera pacífica, sin empuñar nunca un arma”, expresó.

Recomendamos: La Revolución de las mujeres va; esto dicen 5 mexicanas en el frente...

Por su parte, la académica de la Universidad de Guanajuato, explicó que la estigmatización del movimiento feminista evidencia lo poco que lee la sociedad mexicana y la ausencia de educación con perspectiva de género.

Las instituciones (Iglesia y Estado) quieren distorsionar los conceptos de lo que verdaderamente es el feminismo, explica. Dividen a la sociedad y hacen uso de las redes sociales para difundir falsos constructos en torno al feminismo.

“Tenemos una idea romántica de que las redes sociales como que son muy democráticas y muy críticas... ¡pero no es cierto! Las redes sociales crean sesgos y una burbuja, de acuerdo con nuestras filias y fobias [a nivel personal]", mencionó.

En ese sentido, detalla la socióloga, cada mujer recibe información distinta que no le permite ver más allá de lo que vive, consume y piensa. Por ejemplo, una mujer profesionista, que no se asume feminista, quizá tiene por vecina a otra mujer que no terminó una licenciatura, que no trabaja, es económicamente dependiente de su marido y, por lo tanto, percibe el mundo de otra manera. La profesionista jamás mira esta otra realidad ajena a su mundo.

López Sánchez comentó que desde la academia se intenta transformar el concepto deteriorado sobre el feminismo, y poco a poco se han introducido asignaturas optativas en materia y en estudios de género, pero no es suficiente.

Puedes leer: El avance de los derechos de las mujeres en un siglo

Al citar a teóricas feministas, la maestra enfatizó que el patriarcado no solo está en lo público, sino principalmente en lo privado, en los hogares. Y para cambiar el concepto que la sociedad tiene del feminismo, se deben reconfigurar los roles y cuidados dentro del hogar.

Puedes leer también: El Presidente desconoce qué es el pacto patriarcal; ¿tú sabes? Entérate

¿Merchandising feminista?

El documental ¿Qué coños está pasando?, que aborda diferentes discusiones en torno al feminismo, en una parte cuestiona si el capitalismo está utilizando y explotando al mismo.

En ese sentido, Rosa Márquez, explicó que si bien el feminismo tiene dos siglos de historia, el capitalismo lo ha transformado en una moda y se ha apropiado de él para vender, tal como sucedió con la figura socialista del Che Guevara, que décadas después adorna millones de camisetas.

Puedes leer: 5 beneficios económicos que ganaremos todos si México escucha a sus mujeres

Una semana previa al 8 de marzo de 2021, las marca deportiva Panam lanzó unos tenis "feministas" , que terminaron generando polémica. El calzado mostraba grafitis simulados con frases como: "El violador eres tu"; "Ni una más" o "No estás sola".

“El capitalismo se apropia del éxito y de aquello con lo que la gente conecta para vender más productos. Eso pasa siempre, pero también creo que desvirtúa el feminismo o lo banaliza”, detalló.

No obstante, observa que quizá la comercialización ha provocado que las generaciones más jóvenes se acerquen a la causa social.

“Si las más jóvenes empiezan a conectar con el feminismo pues… ¡ Bienvenidas sean!”, dijo , pero recalcó que lo más importante es no permitir que se banalice el movimiento.

Artículos Recientes

10 Lecciones de vida y liderazgo de Gina Diez Barroso

La Directora de Visa México: liderazgo con equidad de género

3 de abril de 2024

Mujeres poderosas y liderazgo: reflexiones de Gina Diez Barroso y la Directora de Visa México

21 de marzo de 2024

Violencia laboral contra las mujeres: una guía sobre qué hacer si la vives

logo dalia

Women shaping the future of leadership.

Suscríbete al newsletter

Recibe en tu correo el contenido que informa, inspira y te conecta con mujeres de nuestra comunidad